CERVICALGIA
¿QUÉ ES?
La natación habitualmente se considera el deporte más sano para la espalda; sin embargo también puede ser cuna de lesiones si los entrenamientos son muy exigentes o la técnica es incorrecta.
Se denomina cervicalgia al síntoma conocido como dolor de cuello, percibido en la zona comprendida entre la línea nucal superior (zona occipital), a la primera vértebra dorsal, y lateralmente limitado por los extremos laterales del cuello.
Causas
Si nos referimos a la natación, la causa más destacada es el sobreuso de esta zona corporal durante las largas jornadas de entrenamientos o competición.
Las lesiones cuello se dan sobre todo en el estilo mariposa y braza, cuando se entrena con una posición de híper-tensión en la columna. Debido a la dificultad del estilo, que requiere más fuerza en brazos y piernas.
También en el estilo ‘crol’, debido a la cantidad de movimientos repetitivos de columna cervical.
Mala técnica
Sintomas
- Dolor en la zona cervical.
- Parestesias (hormigueos).
- Debilidad.
- Pérdida de movilidad.
- Dolor de cabeza.
- Mareos.
- Alteraciones del equilibrio.
- Disfagia (dificultad para tragar).
Tratamiento indicado para ayudar contra la CERVICALGIA
- Reposo relativo; evitar los estilos más lesivos para el cuello y seguir con el entrenamiento sin dolor nadando a espalda. Se puede nadar con tubo “snorkel”, así podremos nadar sin tener que mover la cabeza para respirar fuera del agua y la zona cervical estará perfectamente alineada mientras nadamos.
- Crio-termoterapia
- Terapia manual
- Terapia miofascial
- Terapia neuromuscular
- Osteopatía temporo-madibular, craneal…
- Acupuntura
- Punción seca
- Electrolisis percutánea
- Vendaje neuromuscular
- Movilización articular
- Programa de ejercicios de flexibilización
- Programa de ejercicios de tonificación
- Programa de ejercicios de propiocepción para columna cervical
- Electroterapia. US, láser, TENS, magnetoterapia, micro-ondas…
- Programa de movimiento terapéutico (Pilates terapéutico…)
- Terapia farmacológica
- Perfeccionamiento de la técnica.
- Respirar hacia los dos lados para crear un equilibrio entre la musculatura del cuello, brazos y espalda de un lado y del otro.
Diagnóstico
Para el diagnóstico del dolor cervical es preciso realizar una historia clínica completa de la sintomatología cervical.
Exploración clínica que incluya valoración de la postura, movilidad cervical y zonas dolorosas, así como evaluación de la función de nervios y músculos en brazos y piernas.
Si se requiere, se puede demandar la realización de pruebas diagnósticas como la radiografía, el TAC, o la resonancia magnética, consiguiendo así un diagnóstica diferencial muy concreto.