CONDROMALACIA ROTULIANA
¿QUÉ ES?
La condromalacia rotuliana o patelar se refiere al desgaste del cartílago o tejido blando que protege la articulación.
Estaremos en presencia de una condromalacia cuando existe una alteración de la estructura del cartílago. El cartílago deja de tener una estructura lisa y de color blanco, pasando a tener una superficie rugosa, pudiendo incluso, llegar al extremo de perder parte del cartílago, quedando expuesto el hueso.
Debido a las cargas a las que es sometida esta articulación en la práctica del ciclismo el desgaste del cartílago en estos casos puede ser muy precoz.
Causas
Como en muchos otros casos, el uso exagerado de una articulación puede llevar al desgaste precoz. Muchos deportistas tienen a los 40 años rodillas equivalentes a personas de 60 o 70 años.
En ciclismo una altura del sillín inadecuada, una angulación de las calas excesiva, excesiva flotabilidad en los pedales, una pronación aumentada de uno de los pies, una posible dismetría en las piernas o una rotación de la cadera suelen ser los causantes.
Otras causas no tan relacionadas con el deporte son: el peso, la edad, antecedentes lesionales, como por ejemplo una patología de menisco previa que favorezca el desgaste,
Sintomas
- Crepitación o sonido que produce la rodilla al flexionarla, cuando se dice "me suena la rodilla".
- Sensación de rozamiento cuando se estira la rodilla.
- Dolor de rodilla en la parte delantera cuando se está demasiado tiempo sentado.
- Dolor de rodilla al subir y al bajar escaleras y cuestas.
- Dolor de rodilla al levantarse de una silla.
Recordar que algunos de estos síntomas son inespecíficos y otras lesiones de rodillas los comparten.
Tratamiento indicado para ayudar contra la CONDROMALACIA ROTULIANA
- El primer paso en el tratamiento es solucionar los factores que desencadenan o agravan el cuadro: Desalineación de la rodilla, rótula alta, obesidad, meniscopatía…
- Al tiempo que se corrigen los factores asociados se instaura tratamiento médico, usando analgésicos orales o intra-articulares
- Programa de ejercicios para potenciar la musculatura
- Estimulación de la propiocepción: La condromalacia rotuliana se acompaña con frecuencia de inestabilidad femoro-patelar, que puede mejorarse con rehabilitación.
- El caminar por terrenos planos, nadar y el ejercicio aeróbico acuático son buenas opciones, evitando en lo posible subir y bajar escaleras o pendientes o caminar por la montaña.
- Uso de rodillera con rótula libre
- Electroestimulación iva
- Programa de estiramientos de la musculatura implicada
- Higiene postural para la rodilla
- Administración de conrotectores
- Tratamiento mediante plasma rico en plaquetas
- Evitar sobrepeso
- Plantillas si están aconsejadas en base a un estudio biomecánico (pie pronado, cabezas de metatarsianos).
- Calzado adecuado con suficiente absorción de carga.
- Inyecciones intraarticulares.
- Electroterapia antiálgica
- Corrección de la técnica de pedaleo
- En último término, cuando el tratamiento conservador falla en el control de los síntomas, en el caso de que existan defectos circunscritos del cartílago, puede optarse por una opción quirúrgica.
Diagnóstico
El diagnóstico se basa en una buena historia clínica y el estudio radiológico. La RNM (Resonancia Nuclear Magnética) nos informa con precisión de la lesión del cartílago y del hueso así como derrames líquidos.
Puede ser necesario recurrir a la exploración artroscópica para valorar el estado del cartílago o la existencia de lesiones no detectadas en la resonancia, cuando siga existiendo dolor a pesar de medidas conservadoras y de haber corregido los factores que empeoran el cuadro.
Preguntas Frecuentes
Sería recomendable quitarle peso a esa rodilla, por lo que el trabajo guiado en piscina puede ser una de las mejores opciones. Todo depende del grado de degeneración del cartílago, y a medida que la musculatura está más tonificada aumentará la posibilidad de volver a montar en bici.
El cartílago es incapaz de regenerarse por si mismo, las técnicas de las que disponemos actualmente no son capaces de regenerar las lesiones del cartílago reponiendo un tejido idéntico al anterior a la lesión. La gran esperanza es el avance en la investigación con células madre, estas podrán realmente regenerar el cartílago y recuperar la función articular.
Los fármacos conrotectores, compuestos por sustancias que también se encuentran de forma natural en el cartílago, no acaban de confirmar científicamente su papel en la protección y reparación de las articulaciones. Pero su falta de efectos secundarios y buenos resultados en algunos casos (disminución del dolor e inflamación) nos permiten seguir fomentando su uso.